Información de: Etcétera
Bien se sabe que los hospitales y clínicas del Instituto Mexicano de Seguro Social (IMSS) carecen de falta de insumos, tal como lo atestiguan cientos de derechohabientes.
Sin embargo, dicho instituto no tiene reparo en pagar boletos de avión, gasolina, hospedaje, alimentos, carpas, sillas y equipo de sonido para las diversas giras del presidente a hospitales del país.
De acuerdo con una solicitud de transparencia realizada por Reforma, tan solo de julio a septiembre, el IMSS, dirigido por Zoé Robledo gastó 10 millones 406 mil 494 pesos en las visitas que el presidente y colaboradores realizaron a diferentes hospitales.
La mayor parte del presupuesto empleado lo aportó el Programa IMSS Bienestar, que se enfoca a dar atención a la población de escasos recursos en zonas rurales y urbanas, pues erogó 9 millones 674 mil 966 pesos, los cuales pudieron usarse para subsanar carencias.
Robledo también falta a su deber
Los 731 mil 528 pesos restantes salieron del presupuesto de la Dirección de Vinculación Institucional y Evaluación de Delegaciones estatales del IMSS. Por citar solo un rubro, el transporte terrestre de esta gira costó (tan solo de julio a septiembre) 65 mil 254 pesos en gasolina y 18 mil pesos 864 en casetas.
Es evidente que para el IMSS es más importante la presencia del presidente para encabezar eventos y dar discursos que resolver problemas estructurales.
Cabe señalar que Robledo también falta a su deber al dedicarse a organizar festejos–como la celebración del 20 de noviembre en el Zócalo y la ceremonia del 15 de septiembre–en lugar de dedicarse por completo a su trabajo al frente del instituto.
De acuerdo con esta información, AMLO visitó más de 60 clínicas y hospitales rurales, y en casi todos ellos se organizó un evento con equipo de audio y sonido, templete, carpa, vallas y más.