Un hombre roció con ácido la cara de su expareja luego de que esta se negara a regresar con él.
Primero me pidió que le diera oportunidad de estar conmigo y que iba a cambiar, después cuando le dije que ya no, me empezó a amenazar que le iba a pagar cada una de las cosas que él estaba viviendo en ese momento y que si no iba a estar con él, entonces ya con nadie”.
El hombre ya había violentado a la víctima durante varias ocasiones: además de agresiones verbales y amenazas, el agresor llegó a “picar” a la afectada.
A pesar de las pruebas, su carpeta de investigación estuvo perdida durante cuatro años.
El culpable sigue libre. Hasta la fecha, las autoridades no han tomando represalias legales.