Notimex.- El Museo Nacional de Historia cuenta con una colección antiquísima de indumentarias y accesorios, no solamente de carácter histórico, sino también con piezas civiles que por el paso del tiempo se han deteriorado no sólo sus materiales sino también su forma.
Por ello, con motivo de sus prácticas intersemestrales, alumnos de la Escuela Nacional de Conservación, Restauración y Museografía tuvieron acceso a tres tocados, conocidos también como bonetes, fechados entre los siglos XIX y XX, además de un vestido dañado por el uso, para restaurarlos.
“Lo ideal es que la misma mano los trabaje de principio a fin, en un tiempo relativamente corto. Gracias al apoyo de la escuela se logra tener piezas prontas a exhibir, los tratamientos que ejecutan los alumnos son respetuosos, lo menos invasivos y se realizan con suma precaución”, declaró la restauradora Verónica Kuhliger, adscrita al Museo Nacional de Historia.
Los procesos que llevan a cabo los alumnos implican aplicar vapor y papel secante para retirar la suciedad de las plumas en algunos tocados, para las flores de terciopelo un microaspirado y planchado.
Al vestido, debido a alteraciones en su forro de seda, se le hicieron refuerzos con crepelina de seda y se le cosieron nuevamente los broches.
Dentro del museo una de sus colecciones más numerosas en sus accesorios es la de sombreros, que suma unas 700 piezas de diversos estilos: militar, civil, eclesiástica y de charrería.
Algunas de ellas pertenecieron a personajes como el presidente Benito Juárez y al general Francisco Villa, se indicó en un comunicado.